domingo, 25 de marzo de 2012

Los más raros

no es frecuente verlos
porque donde hay multitud
no están
ellos.

esos tipos raros no son
muchos,
pero de ellos
provienen
los pocos
cuadros buenos
las pocas
buenas sinfonías
los pocos
buenos libros
y otras obras.

y de los
mejores tipos
raros
quizá nada.

ellos son
sus propios
cuadros
sus propios
libros
su propia
música
su propia
obra.

a veces me parece
verlos;
por ejemplo
cierto
viejo
sentado en
cierto banco
de un cierta modo

o
un rostro fugaz
en un automóvil
que pasa
en dirección
contraria

o
un cierto movimiento
en las manos
del chico o la chica
del supermercado
mientras meten
la compra
en las bolsas.

a veces
es incluso alguien
con el que has
estado viviendo
algún
tiempo:
notas
una
mirada
de rápida iluminación
que nunca
le habías visto
antes.

a veces
sólo notarás
su
existencia
repentinamente
en un
vívido
recuerdo.
algunos meses
algunos años
después de que se hayan
ido.

recuerdo
a uno:
tenía unos
veinte años
iba borracho a
las 10 de la mañana
se miraba en un
espejo
resquebrajado
de Nueva Orleans

un rostro soñador
contra los
muros
del mundo.
¿qué
ha sido
de mí?

De Charles Bukowski.